Una mancha nueva. Un lunar que cambia. Una zona más oscura que antes pasaba desapercibida. Todos estos signos tienen algo en común: son formas en las que la piel nos cuenta una historia. A veces, es solo una huella del sol o del paso del tiempo. Otras, es una señal de algo que conviene revisar.

Las lesiones pigmentadas son alteraciones del color natural de la piel, y aunque muchas de ellas son inofensivas, también pueden ser el reflejo de procesos más complejos. Saber distinguirlas es una herramienta poderosa para cuidar tu salud y sentirte más tranquilo con lo que ves en el espejo.

En esta sección hemos reunido artículos pensados para acompañarte con información clara, útil y respaldada por profesionales en dermatología. Te ayudamos a diferenciar entre lo que no representa riesgo y lo que merece atención médica, siempre con un enfoque comprensible, cercano y sin alarmismos.

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También compartimos consejos prácticos para prevenir nuevas manchas, proteger tu piel del sol, y opciones para mejorar la apariencia de las lesiones que ya tienes, sin necesidad de tratamientos invasivos si no lo deseas.

¿Sabías que pequeños gestos diarios, como usar protector solar o prestar atención a los cambios en tu piel, pueden marcar una gran diferencia a largo plazo?